Charla-Coloquio organizada por ASEMAR y FAE en la Cadena Ser de Aranda de Duero.
22 junio, 2021
El pasado miércoles 09, en un agradable coloquio organizado por ASEMAR y FAE en la Cadena Ser de Aranda de Duero, compartieron mesa, nuestro gerente Teodoro Esgueva Muriel y el gerente de Tubos Aranda, Borja García Chinchurreta.
Ambos defienden la gran unidad que existe en el sector metalúrgico arandino, donde no hay competitividad sino apoyo y entendimiento. «El grupo del metal ha participado en todo. Solamente hemos visto colaboración entre nosotros, nunca competencia. El PIB industrial de Burgos es superior al del País Vasco, por ejemplo. Emprender un proyecto con gente preparada no tiene ni color con gente que no lo está, y nos tenemos que adaptar y rápido. Vivimos en un mundo muy cambiante, cada empresa dentro de su realidad, y debemos irnos adaptando a las nuevas circunstancias y eso con un buen equipo de personas es mucho más fácil. En Aranda hay muy buena gente, implicada y trabajadora, eso es importantísimo», cuentan.
Ambas empresas tuvieron que enfrentarse a un año que lo cambió todo. Pero lo han hecho con firmeza y éxito. Teodoro Esgueva, de Imesa, cuenta que «quizá no sea un buen termómetro lo que yo diga, pero no fue difícil para Imesa». «Sufrimos el apagón temporal, pero en España solo hubo un receso entorno a un 25% sobre nuestras previsiones, y en Latinoamérica vino siendo en torno a un 25. En 2020 seguimos cerrando proyectos en estos países sin problemas, pero vimos que esa congelación nos traería repercusiones en 2021. Tuvimos que llegar a acuerdos bilaterales con nuestros clientes fuera de España porque los proyectos vivos y el transporte no se pararon, pero sí el montaje y puesta en marcha», especifica.
En la misma línea explica lo sucedido García, teniendo en cuenta la situación que Tubos Aranda tiene que lidiar respecto a la subida del precio del acero. «El 2020 fue un gran choque. Lo que se aplicó en la economía es que le dimos al freno de emergencia y se paró; algo que nunca había pasado. Y tienes tal inercia que por mucho que todos empujemos, al principio se gira. Pero en julio la actividad era por encima por lo normal y los meses siguientes igual. Estamos metidos en un fenómeno como es el acero, en el que vivimos un cambio nuevo. Venimos de un mundo antes globalizado, y la mitad del acero se producía y consumía en China, que era exportador. Eso ha cambiado. El gobierno chino ha decidido que quiere una sociedad más avanzada; ya no produce yendo en contra del medio ambiente. Han clausurado fábricas contaminantes y reducido su capacidad. Han pasado de ser exportadores. Ese acero que salía al resto del mundo no fluye. Empezamos a ver una escasez de acero, sobre todo en Europa. Se genera una demanda y hace que suban los precios. La relación entre oferta y demanda. Y estamos cogiendo esa ola», explica.
Tras un año de crisis, ¿cómo está siendo para ellos 2021? «Nuestras fabricaciones en el 20 fueron producto de los contratos del 19. El 20 se paró en seco, pero en el segundo semestre cerramos operaciones para 2021. Unas en el Ródano en Francia, y otras en países pobres, pero con espíritu de inversión como Honduras o Guatemala. Eso nos ha permitido mantener nuestro ciclo de inversión. Las previsiones se rompen al día siguiente. Y eso es lo que nos pasa, que nos genera inestabilidad, sobre todo con las empresas españolas. Los países latinoamericanos son serios todos. Aquí, por experiencia propia, en aspecto de pagos hay seriedad, pero no en los plazos de licitaciones«, explica Teodoro Esgueva.
«Vivimos en una incertidumbre permanente. Nosotros estábamos volcados en el sector fotovoltaico, un sector muy pujante en España. Ahora de repente ha habido un parón en seco, en parte por la subida del precio del acero y porque las placas solares se fabrican en China y quieren que se queden allí. Eso no nos lo esperábamos y tenemos que adaptarnos como empresa y tener cintura. Nosotros trabajamos en sectores diferentes y eso es una fortaleza; no depender de alguien que te pueda arrastrar. Hay sectores fuertes que han caído como la aeronáutica. La inversión al final supone riesgo y un empresario tiene que saber hacia dónde quiere ir, y ya te vas buscando la financiación para llegar ahí», especifica García.
Pero, ¿en qué andan ahora estas empresas? Teodoro Esgueva cuenta que «lo más corto es conseguir que los trabajadores -sobre todo el equipo de montadores que tienen que salir de España- estén vacunados, cosa que si alguien nos escucha que tenga que ver en esto le pido nos ayuda, necesitamos traer plata de fuera». «Tenemos que poder salir y salir en condiciones. Nosotros en el mes de enero montamos montajes en Colombia pese a la covid y se cumple el protocolo con unos costes adicionales para las empresas y el esfuerzo extra de la gente. El día 10 de mayo tuvimos que sacar a las dos últimas personas que teníamos allí por la situación de inestabilidad que hay en la calle. Cuando pase seguiremos con esos montajes, sigue habiendo acuerdos con nuestros clientes en esa línea y vamos a continuar con eso. Hemos contratado a más gente porque creemos en el futuro, pero hay que tener mucha cintura. Hacer previsiones, pero no sabemos hasta cuándo», añade.
Para Tubos Aranda, el proyecto más inmediato «es la ampliación que ejecutamos ahora, un almacén que lleva novedades». «En las empresas hemos de innovar, queremos montar un sistema de venta que tiene tirón en Europa, es como un Amazon del tubo, te van pidiendo cosas, se almacenan y el cliente lo recibe a su medida y rápido. Es adaptarse a las necesidades del mercado», explica Borja García.
Por último, y al unísono, ambos empresarios ven imprescindible poder optar a más trabajadores cualificados que salgan de las escuelas formativas de la comarca, que se antojan cortos, y motivan a tener que buscar fuera de Aranda. «En nuestro sector las subcontratas tienen empleo. Hemos contratado tres técnicos, uno de Bilbao, otro de Portugal, y necesitamos más porque los de esas subcontratas no tienen personal. Y seguimos sin tener trabajadores cualificados en Aranda. Hay que hacer un reparto, las empresas grandes no se pueden llevar todos los estudiantes de nuestras escuelas de formación, necesitamos puestos que no son para picos, tenemos que cubrirlos, necesitamos gente en prácticas. No hay demanda en el mercado local y sí hay oferta… ¿Cómo hacemos esto?«, se pregunta Teodoro Esgueva.
Fuente Cadena Ser.